A cuartos de final con coraje y corazón

El Real Madrid se clasifica para los cuartos de final de Copa del Rey después de un trepidante partido en el Sánchez Pizjuán, que se complicó mucho por momentos.

El equipo andaluz comenzó con mucha intensidad y a los 10 minutos se adelantaron en el marcador con un gol en propia puerta de Danilo. Seguirían atacando sin parar hasta el minuto 20, pero poco a poco el Madrid fue entrando en el partido. Aun así la primera parte acabó con 1-0 para los locales.

A los 50 minutos de partido Marco Asensio corrió por la banda izquierda del Pizjuán y anotó un gol por debajo de las piernas de Soria. El gol recordó mucho al de Gareth Bale en la final de Copa de 2014 en Mestalla. Poco después llegó el gol de Jovetić, que adelantó de nuevo a los sevillistas con un gol en su debut. A 13 minutos para el final Iborra ponia el 3-1 y entraba el pánico en el madridismo, los locales se venían arriba. En el minuto 83 se dio la jugada de las que más se ha hablado en el partido. Penalti para el Madrid, Sergio Ramos coge el balón y se dirige a tirarlo, y lo clava a lo panenka. Lo celebró señalando su nombre a una gran parte de seguidores del Sevilla que se pasaron el partido insultándole. Aun así el Madrid perdía y parecía que se acababa la racha de victorias, pero en el glorioso minuto 93 llegó el gol de Benzema que puso el empate a 3 en el marcador.

El Madrid tiro de coraje y corazón para mantener la racha de partidos sin perder, que asciende a 40. Lo cierto es que hay que hacer mucha memoria si queremos recordar una derrota del Madrid. Ahora toca pensar en el domingo, que tocará volver al Pizjuán en liga con el claro objetivo de ganar.

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